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lunes, 23 de junio de 2014

NO CULPES AL KARMA de lo que te pasa por gilipollas - LAURA NORTON



" No sé que habré hecho en otra vida para que ahora todo me pase a mí. Yo sé que no es culpa mía, tiene que ser del Karma, o de él, si, de Aarón . Para qué nos vamos a engañar. Porque desde que apareció en mi vida..."
No culpes al Karma de lo que te pasa por gilipollas. Sí. Tengo que reconocerlo. Si elegí este libro fue por ese título tan guapo que tiene. ¿O me vais a decir que, como mínimo, no llama la atención? No sabía muy bien qué era lo que me iba a encontrar entre sus páginas. No conocía a la autora de lecturas anteriores. el nombre de Laura Norton me sonaba de poco o de nada. Y la portada tampoco es que me resultara especialmente llamativa que digamos. Dos flamencos rosas, puestos ahí, enfrentados, formando un corazón con sus cabezas...¿Me gustaría? ¿Lo dejaría a las pocas páginas de haberlo empezado? No lo tenía nada claro pese a esa publicidad que lo acompaña que prácticamente vaticina su éxito con la contundente afirmación de: " La historia que está deseando leer cualquier chica entre 18 y 98 años " . Pues bien. Si cualquiera estaba deseando leerla...¿Porqué yo no?... Así que me puse a ello y, después de prácticamente habérmela leído en apenas un par de días, tengo que decir que... ¡Me ha encantado!. No sé como lo hizo pero fue empezar a leer y no poder parar, o hacerlo a regañadientes , cada vez que me ponía a leer. Eso que se escribe karma y se lee: "Toma, por gilipollas" tiene un no se qué que qué se yo que ha hecho que se me pasen las horas volando acompañando a los protagonistas de esta historia que, si bien está protagonizada por Sara, cuenta con un reparto de personajes que son muy humanos y tienen unas reacciones tan humanas como echarle la culpa a otro...y claro, al final pasan las cosas que pasan, un conjunto de "desgracias" que, pudiendo salir bien o mal, escogen el segundo camino, pero saben sobreponerse a las dificultades y buscarle cinco pies a la gata ( de ser gato no sería tan complicado ) para salir airosos de ellas, y, aunque tenga un final de lo más emotivo, aquí, lo importante no es la meta, sino la senda recorrida o, puestos a ser más coherentes con el libro, la carrera recorrida entre ambos puntos del libro. 


DE QUÉ VA


Es difícil hablaros de este libro sin que se me llene la boca de spoilers. Entre otras cosas porque pasan tantas cosas y, algunas de ellas están tan guapas, que le dan ganas a una de comentarlas sin remedio. Tiene un título interesante, pero sólo de un frase, por muy introductoria que sea, no se sustenta un libro y este tiene algo más. Un no sé que, que qué se yo, que hace que, una vez que hayas empezado a leerlo, no puedas parar de hacerlo. 

Lo que sí puedo decir, sin miedo a destriparle nada a nadie, o al menos a un posible lector, es que aquí, Sara, en primera persona y en pasado, nos contará su historia. Una historia que comenzará en sus años de instituto y culminará cumplidos los treinta. Una historia en la que se verán involucrados su familia ( padre, madre y hermana), su actual novio, su amor de la adolescencia y algún que otro amigo eventual, de los cuales os hablaré un poco más detenidamente en posteriores apartados. Sara vivía tranquilamente en su casa, sola, con sus más y menos, pero en una relativa tranquilidad cuando, de repente, su casa se ve plagada de gente y su vida de extrañas circunstancias. 

Hasta ahí podría leer. Para aquella que quiera saber más del tema, os dejo, como no, aunque tampoco demasiado aclaratoria, la sinopsis oficial de la novela. Y, si os seguís quedando con ganas de más, leedla, no os vais a arrepentir de hacerlo...


SINOPSIS OFICIAL

Si estás leyendo estas líneas es que te ha llamado la atención el título.
¿Te gustaría decírselo a alguien? 
¿Serías capaz de decírtelo a ti mismo?

Y lo más importante: 



¿Te gustaría mantener durante un buen rato la sonrisa que se te ha quedado en la cara? 



Pues esta es tu novela. 
Te podríamos contar con más o menos gracia de qué va la cosa, para que te hicieras una idea: que si la protagonista, Sara, es muy maja, que si tiene un trabajo muy interesante (es plumista, ¿a que nunca lo habías oído?), que si es un pelín obsesiva y alérgica a los sobresaltos... 


Por supuesto, la vida se le complica y se encuentra con que su piso se convierte en una especie de camarote de los hermanos Marx cuando en la misma semana se meten a  vivir con ella su padre deprimido, su hermana rebelde y su excéntrico prometido y, sobre todo, el novio al que lleva mucho tiempo sin ver... 

Pero mejor no te lo contamos porque te gustará leerlo.Lo único que necesitas saber es que, desde el título, te garantizamos unas cuantas horas de descacharrante diversión como hacía tiempo que no disfrutabas.

¿LIBRO AUTOCONCLUYENTE?

Las sagas están de moda. Es algo con lo que todos contamos, sobre todo teniendo en cuenta los últimos booms literarios que encontramos en el mercado. Casi todos, como poco, cuentan con dos partes. Y no voy a decir que, cuando acabas una historia que te gusta, no te apetezca seguir leyendo sobre ella. Encontrar nuevos matices, darle nuevas oportunidades a sus personajes de dar más tumbos en su vida, continuar con la ecuación que ya has despejado una vez. La última saga que leí, " Los zapatos de Valeria " si no recuerdo mal, contaba con cuatro libros y a cada cual pasó más rápido. Para nada me importó que fuera una saga porque terminaba cada cual, exceptuando el último, en el que todo se acaba, de tal manera que hacía que quisieras seguir leyendo, con la sensación de que la cosa no podía terminar ahí y tenías que pasaba.

Sin embargo, las sagas también cansan. Personalmente, aunque no tengo nada en contra de ellas, prefiero que un libro tenga más páginas pero empiece y acabe en el mismo tomo que tener que leer tres, cuatro o cinco libros para poder llegar al fin de una historia. Supongo, y sospecho, que el secreto de que tengan tanto éxito puede deberse principalmente a dos motivos: las editoriales venden más ejemplares si nos lo venden en tres tomos en vez de en uno y a la gente normal le asustan los tochos demasiado gordos. 

En este caso, no tenemos un tocho excesivo. Poco más 400 páginas  son con las que cuenta y están tan bien llevadas que se acaba y apenas te das cuenta. Y, cuando lo hace, todos los cabos están atados de tal forma que, sí, dándole rizo al hilo, se podría continuar, nos podrían contar más cosas, pero también se puede dejar la cosa ahí tan tranquilamente. 

ESTILO

En No culpes al Karma ( de lo que te pasa por gilipollas ) nos encontramos con '''un estilo muy fresco, muy directo, muy fácil de leer y muy cercano. 

Sus capítulos tienen una longitud perfecta para que no se hagan ni demasiado largos ni demasiado cortos y, aunque todos forman parte de la misma historia, aunque cada uno de ellos es un paso en la vida de Sara, cada uno nos cuenta como ella misma va evolucionando según las cosas que le van pasando, vemos como piensa y como nos contagia con sus alegrías y sus pesares. A parte de eso, cada uno viene acompañado por un título que, si bien a priori puede no parecer demasiado representativo, acabado el capítulo se le encuentra su porqué, algunos son más crípticos y otro un mero recordatorio de lo que vamos a econtrarnos, como si estuvieran puestos en una agenda a modo de planes pendientes. 

El vocabulario es muy simple, al alcance de cualquiera, facilidades para leerlo sin tener un diccionario al lado, con alguna que otra palabra más elaborada, pero tampoco es que abunden precisamente. Y no es algo que le pida a un libro como el que tenemos entre manos. 

Abundan más las narraciones que los diálogos, aunque estos también tiene su buena cabida en el texto y las narraciones más que narraciones en sí, sean pensamientos e impresiones de la protagonista. Ella te lo está contando como si tuviera enfrente a su amiga del alma o a cualquiera que quiera escucharla, como si se dirigiera a ti directamente, en plan, " así son las cosas y así os la hemos contado ", en '''primera persona, por supuesto, que para eso es su propia historia. Y, haciendo referencia a los diálogos, decir que no están demasiado elaborados y eso los hace más naturales, más del día a día, no quedan raros, sino que son conversaciones que bien podría tener cualquiera con cualquier allegado. 

También quiero resaltar, aunque no sean parte esencial del estilo del libro ni lo condicione en demasía, las estrofas de canciones que incluye de vez en cuando. Me han gustado mucho y creo que bien podría tener música, aunque más que rock, como se le define, podría ser un poco popero, eso sí, dependiendo de la música de fondo que se le ponga y los solos que se incluyan y algunas frases que deja que bien podrían ser incluidas en un estado de facebook o ser guardadas para el recuerdo ;).


ALGUNAS FRASES EXTRAÍDAS DEL LIBRO



" Mejor quemarse que volar a saltitos, ¿No?
 ¿Dónde está la épica en un vuelo raso? "



" Nunca he entendido a esa gente que dice que solo existe el presente y que hay que disfrutarlo sin pensar en el ayer ni en el mañana. Como si el pasado y el futuro no condicionaran de forma determinante el presente. Como si fuera lo mismo el presente de un chaval de veinte años que el de un anciano de ochenta. ¿Acaso pesa lo mismo un presente en el que solo hay futuro que un presente en el que ya solo queda pasado? "





" Quiero que seas tú. Y que haya mil noches como esta. Y que todo el mundo lo sepa. ¿Tú quieres que esto no acabe nunca? "

" Las experiencias a vida o muerte tienen que servir para algo. Vale, tal vez no sirvan para nada. Pero ya que pasamos por ellas, al menos darles un sentido "


PERSONAJES


¿Creíais que iba a largarme sin hablar de los personajes tal y como había prometido? ¿Que se me había olvidado después de tanta cháchara? Pues no, si habéis " osado la capaz " de pensar semejante cosa es que todavía no me conocéis, tampoco es culpo por ello, no es algo fácil de conseguir ;).

En fin, dejando de hablar de mí y hablando de los personajes de la novela, decir que todos y cada uno de ellos me han parecido de lo más naturales y bien llevados, personas que fácilmente podrían ser de carne y hueso sobreponiéndose a cada una de las cosas que les van pasando, sobre todo Sara.

Sara es una tía que me ha encantado. Un poco veleta a veces. Fácil de despistar y con tendencia a olvidar su sueño, pero muy molona, las cosas como son. No es de ese tipo de tía pavisosa que tan de moda se pusieron en la literatura hace unos años sino que, en la medida de lo posible, tiene los pies en la tierra y, aunque se deja llevar por sus fantasías de vez en cuando...¿Quién en su sano juicio no lo hace alguna vez? 

Lu, Lucía, es su hermana pequeña. Y, si Sara me ha encantado, Lu me ha enamorado completamente. Y nada tiene que ver que sea descrita como una tía despampanante, es que tiene una personalidad arrolladora. Puede que un poco ( bastante ) impulsiva y a veces hable sin pensar demasiado en las consecuencias de sus palabras, puede que cuando se pone insoportable se pueda ganar el guiness de lo récord, pero a mí me chifla esta tía.

Inma es una amiga de Sara que trabaja como esteticien, a pesar de haber estudiado dos carreras y no sé cuantos máster, pero así están las cosas en España...Cosas de la crisis, supongo. Es un personaje que, aunque aparece poco, también me ha gustado mucho, y no puedo decir mucho más de ella porque si quéreis leer el libro luego no os llevaréis la sorpresa.

Berta: Aunque tiene nombre, la mayoría del libro la he identificado como la madre de Sara, incluso después de saber cómo se llamaba. Es un personaje que da mucho de sí y del que tampoco puedo decir mucho más.

David y Chusa: Introduciendo a David junto a Chusa como primer personaje masculino del que hablo, decir que son dos amigos de Sara que la apoyaran en todo momento. 

El padre de Sara: Probablemente tenga nombre, pero lo he olvidado. Tampoco es que sea demasiado importante, su nombre, digo, porque el personaje anda que no da juego en la novela...

Roberto: Es el novio de Sara. Está en París por un año pero ha venido a verla y es otro de los inquilinos que se han autoinvitado a su casa. Viene junto a '''Eric''', al que describe como un nórdico con pinta de vikingo. Roberto es un personaje que no me ha hecho mucha gracia, no es que de mucho juego y es más bien sosete...

Aaron: Finalmente, Aaron, el amor de la adolescencia de Sara que desapareció casi por arte de magia de un día para otro y, tal y como se fue, volvió, ahora está aquí para volver loca a Sara, un poco más si cabe. 

KAYLA MORRISON...¿CULPA AL KARMA?


Precisamente, alguna que otra vez he pensado en el título de este libro, pero no como tal, sino como frase hecha. Sin embargo, no me esperaba encontrarlo título de una lectura. Y me sorprendió. Me sorprendió mucho. Tanto que dejé atrás otras lecturas que tenía pendiente para ponerme con él.

¿Porqué? ¿Sólo por un título? Pues sí, hay veces que son las portadas las que me enamoran y otras los títulos los que me atraen como cantos de sirena hasta ellos. Soy una tía muy cabezota. Lo sé. Y cuando empiezo algo tengo que acabarlo, me lleve el tiempo que me lleve. Pocas son las cosas que he dejado a medias, y con mucho pesar por mi parte y dándome muchos palos yo sola, sin necesidad de nadie. Pero esta vez no he necesitado a mi cabezonería para seguir adelante, porque, como ya dije, '''el libro me ha encantando, pero es que no es solo eso, sino que me ha enganchado desde el principio''', si tuviera páginas, que no las tiene, porque lo he leído desde mi libro digital, probablemente me habría quedado pegada ellas. 

Este es un libro entretenido. Promete estar riéndote todo el rato y es verdad que no es para tanto, aunque te saca más de una sonrisa, es divertido, es verdad, pero sin llegar a la carcajada. Aún así, sientes a los personajes tan cercanos que, una vez que lo acabas, sientes como si fueran tus amigos, que te han acompañado en una aventura en vez de acompañarlos tú a ellos, como si hubieras sido algo más que un mero espectador que se ha colado en el salón de esa casa que parecía el camarote de los hermanos Marx más que un hogar. 

He disfrutado mucho leyéndolo, me he reído, me he emocionado, se me ha pasado el tiempo volando, me he quedado enganchada a sus páginas. Y, aunque puede que sea cierto que no es un libro que deja poso y que, probablemente acabe olvidando, el tiempo que he estado a su lado, realmente ha merecido la pena.

¿Lo recomendaría? Por supuesto que lo haría, lo haría y lo hago. Fervientemente. Con ilusión. Para el verano es una lectura estupenda, entre lo entretenida que es y que no te hace pensar mucho, solo tienes que dejarte llevar y reírte de esas cosas que, afortunadamente, no te están pasando a ti ;) Por otro lado, por muchas cosas que a Sara le pasan, yo diría que es un libro muy optimista, que te deja con una sensación muy buena, muy agradable...

Eso sí, si me preguntas si volvería a leerlo, por mucho que me haya gustado, que lo ha hecho, posiblemente mi respuesta sería negativa pues, una vez que lo has leído, deja de ser lo mismo, deja de tener el mismo interés. 

1 comentario:

  1. Pues a pesar de ver que lo has disfrutado bastante, no termino de animarme con este libro.
    Besotes!!!

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